AFP.


La tensión volvió a emerger este sábado en Hong Kong, con enfrentamientos entre la policía y manifestantes que habían erigido una barricada en una calle, en el tercer mes de movilizaciones en esta excolonia británica.

Al menos una persona fue detenida cuando las fuerzas de seguridad intervinieron, lanzando gases lacrimógenos, contra los manifestantes, que les lanzaban botellas, piedras y otros objetos, constató en el lugar un periodista de la AFP.

Estos incidentes ocurren tras varios días de aparente calma en la excolonia e importante centro financiero internacional, que vive su mayor crisis política tras su devolución a China en 1997.

La situación era particularmente tensa en el barrio popular de Kwun Tong, una zona industrial al este de la parte continental de Hong Kong.

Miles de manifestantes, muchos de los cuales llevaban máscaras de gas y cascos, fueron bloqueados por decenas de policías antidisturbios, cerca de una comisaría.

Fue entonces cuando Los manifestantes erigieron una barricada, y profirieron insultos contra la policía, a la que acusan de cometer violencias.

Hong Kong ha sido escenario de una escalada de violencia en las últimas semanas, aunque los dos últimas manifestaciones fueron relativamente tranquilas.

Los policías usaron gases lacrimógenos, porras y balas de goma, frente a los manifestantes radicales que lanzaron ladrillos y cócteles molotov.

La excolonia británica es escenario desde junio de manifestaciones contra un proyecto de ley que pretende autorizar las extradiciones hacia la China continental, donde la justicia está bajo la influencia del Partido Comunista.

El movimiento de protesta amplió rápidamente sus reivindicaciones para pedir más democracia, en una ciudad donde los jóvenes enfrentan el aumento del costo de la vida y dificultades de encontrar empleo.